Ya te has dado cuenta de que el próximo paso para hacer crecer tu consulta es realizar algunas acciones en el mundo online… pero sólo pensar en ello y… ay! no puedes parar de pensar en que tu vida va a quedar completamente expuesta.
Y esto te frena.
Si piensas que por tener una web, por estar presente en las redes sociales, toda tu vida personal va a estar expuesta, y tienes miedo a perder esa intimidad, ese anonimato, este artículo es para ti.
Sigue leyendo porque desmontaré una a una las creencias que te impiden mostrarte online para que puedas conseguir al fin, llegar a más clientes.
Índice
1. No quiero exponer mi vida personal
Cuando piensas en tener una presencia digital, puede que te asalten pensamientos de este estilo: voy a perder mi intimidad, van a saber dónde vivo, no quiero que cualquiera pueda encontrarme, me van a reconocer por la calle, cualquier persona puede ponerse en contacto conmigo, me van a hackear y van a tener toda mi información…
Es normal tener estas dudas, porque te has criado en un entorno en el que, simplemente, no tenías por qué preocuparte por esto. Sin embargo, desde la llegada de la tecnología, han aparecido nuevos factores, y esto hace que te preguntes qué es lo mejor.
Pero déjame decirte, que la mayoría de estos pensamientos están basados en la visión “egocéntrica” del ser humano, es decir, creer que eres el centro del universo.
No te sientas mal por esto, es algo automático y una creencia que a mí también me asalta en ocasiones.
Sin embargo, la realidad es que el mundo no está tan pendiente de ti de lo que te gustaría… Qué chasco, ¿no?
En general, a las personas les importa bien poco lo que hagas o dejes de hacer, o dónde vivas…
La realidad es que el porcentaje de personas que van a llegar a donde ti para “incordiarte” es muy pequeño, y desde luego merece correr ese riesgo si en contraprestación vas a ganar clientes y visibilidad en tu mercado, ¿no crees?
Además, la aparición de un trol (persona con identidad desconocida que publica mensajes con la intención de provocar una respuesta emocional negativa), en realidad es positiva, porque significa que eres lo suficientemente relevante. Como ya sabes, una causa importante siempre tiene adeptos y personas contrarias a la “ideología”.
Ahora bien, a quienes sí les importas son a tus clientes potenciales. Ellos sí quieren saber más sobre ti, y no solo a nivel profesional. La experiencia que tienes es muy importante, pero también lo es conectar, empatizar, hacerles ver que les entiendes, que sabes por lo que están pasando.
No olvides que tus clientes son seres humanos, y todos queremos que nos escuchen y nos den un poco de amor y atención 🙂
La conclusión es muy clara: si tienes un negocio, quieres que te conozcan. Porque de esta forma, vas a poder llegar a más personas y así, ayudar más.
Si no quieres que te conozcan, si no quieres que tus clientes te encuentren…
Bueno… dicho de manera suave, es mejor que te dediques a otra cosa.
2. Me da vergüenza que me vean mis conocidos
Puede que no quieras que tus conocidos sepan a qué te dedicas porque lo consideran “raro”, fuera del estatus quo, no lo entienden, no quieres dar explicaciones…
Por desgracia, esto pasa a menudo si te dedicas a las terapias alternativas. Ya has pasado por la fase de dar explicaciones a tu familia amigos… y simplemente te parece demasiado trabajo.
En la mayoría de los casos, resulta que tu círculo social más allegado no van a ser tus clientes, entonces, ¿por qué preocuparte de lo que piensan sobre tu actividad profesional?
Ya lo sé, es más fácil decirlo que hacerlo…
Pero hay una reflexión un poco más profunda en este tema que me gustaría poner sobre la mesa:
Tu actividad profesional es uno de los pilares más importantes de tu vida, al que dedicas mucho tiempo de tu día a día, y si tu familia, amigos y otras personas de tu círculo social no lo entiendes, o incluso bromean con ello…
Puede que haya llegado la hora de replantearte con quién pasas tu tiempo libre, a quién le dedicas tu valiosa energía, si las relaciones que tienes te nutren y potencian tu desarrollo profesional y personal…
3. No soy lo suficientemente relevante/importante para estar online
Quizás piensas que lo que haces no es lo suficientemente importante como para tener una web, escribir un libro, dar una conferencia o simplemente mostrarte como una autoridad en tu mercado.
Quizás piensas que eso sólo está reservado para personas importantes que ya cuentan con un número importante de seguidores, que son conocidos o que han realizado grandes obras en su vida.
¡Atenta!: Te presento al síndrome del impostor atacando de nuevo.
La mayoría de las personas que hemos pasado por el proceso de crear un negocio digital (incluso, a veces en físico también) hemos pasado por esto.
Si ya tienes una consulta, esto no debería preocuparte, pues ya estás haciendo una labor importante ayudando a tus clientes. El medio digital, es lo mismo que tu consulta presencial, lo único que cambia es el medio en el que entregas tu solución.
Si estás empezando, estoy segura de que has superado situaciones difíciles en la vida, que has logrado cosas (aunque a ti te parezcan irrelevantes o no tan importantes) que pueden ayudar a muchas personas.
En realidad, en el mercado hay muchísimas personas que tienen un nivel más bajo de conocimiento o experiencia al tuyo en un tema en concreto, y es en este tema específico en el que puedes brindar más ayuda.
Por lo tanto, no dudes ni un segundo en que tu ayuda es valiosa para muchas personas que están esperando encontrarte.
4. No tengo nada que decir. No sé qué contar.
Al hilo del punto anterior, si llevas un tiempo en tu consulta, estoy segura de que tienes muchas cosas que decir, si no… ¿cómo atenderías a tus consultantes?
Entonces, puede que te preguntes, ¿para qué escribir si ya está todo escrito? ¿Si cada vez que busco algo en internet me salen miles de artículos y vídeos hablando de lo mismo?
Aquí, amiga mía, entra tu factor diferencial.
Alguna vez te has preguntado ¿por qué hay tantos terapeutas y tantas terapias distintas?
Y lo más curioso de todo es que parece que todos tienen su clientela…
¿Cómo es esto posible?
Porque todos queremos ser felices, pero hay un millón de maneras de conseguirlo, y cada cual lo consigue a su forma.
El camino del desarrollo personal es uno, pero tiene muchas variantes. Por esto mismo, tu punto de vista es muy importante, porque conectará con las personas afines a ti, y estas son las personas a las que más podrás ayudar. Precisamente porque conectáis, porque compartís una visión común, ciertos valores, porque habéis pasado por situaciones similares en la vida…
Entonces, una vez que tienes claro que sí tienes ideas valiosas para exponer, el siguiente paso es crear un plan de contenidos con los temas más relevantes para tu audiencia, es decir, las personas que te van a leer.
5. No es necesario, ya tengo clientes que me llegan por el boca a boca
Me atrevo a decir que el boca a boca es el método de venta más viejo y más efectivo que existe.
La razón es sencilla: tus clientes satisfechos te recomiendan, y no hay mejor argumento de venta que un cliente feliz que ha logrado sus objetivos.
Pero…
¿Sabías que los medios digitales pueden potenciar el boca a boca?
Te pongo un ejemplo muy sencillo: qué te resulta más fácil ¿hacer una llamada para pedir información o mirar una página web?
Para la mayoría de las personas, ojear una página web tiene mucho menos riesgo que hacer una llamada por varias razones:
- No tiene que dar su número de contacto (no se expone)
- Puede entrar a la web cuando quiera y las veces que quiera
- No existe la presión de tener que mantener una conversación y “arriesgarse” a tener que contar de entrada qué es lo que le pasa y confiarse a una todavía extraña
- Puede conocerte mejor para saber si tu solución le encaja o no
- Puede elegir ponerse en contacto contigo o no
- …
Resumiendo, la libertad percibida (por mucho que digas que es una llamada sin ningún compromiso) es mucho mayor en los medios digitales.
Y coincidirás conmigo en que, si hay algo que el ser humano detesta es sentirse obligado a algo o la sensación de no tener elección.
Por lo tanto, la mejor opción es tener varias estrategias que potencien que tus clientes te recomienden.
Y sin lugar a dudas, el medio digital es cada vez más útil para este fin.
6. No sé nada de tecnología, y seguro que lo hago mal
Estoy segura de que cuando eras pequeña y en la escuela empezaron a enseñarte a escribir no tuviste este mismo pensamiento.
Aprender un nuevo lenguaje o habilidad puede resultar tedioso al inicio, y al igual que las primeras palabras, te saldrá con el trazo tembloroso, con tachones y tendrás que repetir las palabras una y otra vez.
Si eso no te desanimó en su momento… ¡que no lo haga ahora!
Te aseguro que aprender a utilizar las nuevas tecnologías es cada vez más sencillo, pues el desarrollo de la tecnología sigue un patrón muy claro: ser cada vez más accesible y fácil de utilizar.
Además, hay muchas personas que pueden enseñarte a utilizar la tecnología: tus familiares, tus hijos, profesionales…
Yo misma me dedico a esto mismo, y si tú quieres, te voy a llevar de la mano para que descubras este nuevo mundo y puedas beneficiarte de todo lo positivo que puede traer a tu vida profesional y personal.
7. Internet no es para mí, estoy muy contenta tal y como estoy
Internet está aquí para quedarse.
Si todavía no eras consciente de esto, ahora es un buen momento para aceptarlo.
Ya sea porque creas que no te manejas bien con la tecnología, porque te da pereza aprender, porque crees que no lo necesitas…
Internet cada vez juega un papel más importante en tu vida, te des cuenta o no.
Y cada vez será más relevante.
Estamos en un momento muy interesante porque internet está creando una nueva economía, una nueva forma de hacer negocios, de ayudar a las personas…
En definitiva: una nueva forma de vivir.
Y al igual que pasó antaño con las herramientas de hierro que sustituyeron a la piedra, las herramientas digitales sustituirán a otras herramientas menos efectivas.
Es la ley de la evolución humana utilizar herramientas más efectivas y que requieren de menos esfuerzo.
Ahora, con todas estas creencias desmontadas ¿te atreves a dar el salto? ¿O esperarás hasta que te lo impongan?
Escribe en los comentarios si te han asaltado algunas de estas creencias y si hay alguna otra que te preocupe, estaré encantada de contestarte 🙂